martes, 27 de julio de 2010

Mi luz...

Es aquí donde inicia todo, mis letras, mis pensamientos, mi todo encerrado, mi tristeza reinando...

Ésto debía ser una historia romántica, llena de amor y pureza, como siempre lo he soñado, pero últimamente ha dejado de ser así... Ya lo siento lejos, me aterra la falta de luz, me angustian los tiempos, las pedidas de recesos, cada vez encontrarnos más lejos, cada vez volviéndome más fría, atada al error sin poder ayudar a dar paz... Hace tiempo que no brindo tranquilidad... Me da miedo la oscuridad.

Todas las noches, antes de dormir, recuerdo todo lo que se dice, me bombardeo de errores, tropiezos, equivocaciones, cosas malas que se aprenden de mi. Siendo tú la persona que más amo, eres la misma a la que no puedo hacer reír, descansar o simplemente sentir bien.

Ambos estamos exhaustos.

No puedo mejorar a base de tal método, no puedo tratar de ser mejor recordando todos mis defectos, es que ya me siento simplemente tan decepcionada de mi, como para recordar detalle tras detalle de mis batallas perdidas en esta relación.

Pongo mi honestidad de rodillas, para decirle que ya no puedo más, que me he quedado atrás, soy yo quien se ha estancado en la tristeza, soy yo quien lo ahoga conmigo, quien lo ahorca con mis presiones, quien lo sumerge en lágrimas.

Hoy abrí los ojos a la luz, tu mi luz, lograste que viera con desánimo las diferencias, me lograste despertar del sueño donde tenía pensado que teníamos lenguaje propio, íntimo, un algo más allá.

Yo me presento a ti, mi luz, como una simple mortal atada a la tristeza, siendo así, no suficiente para ti. Pareciese que tu destello y mi sombra no se han podido descifrar y que cuando no hay palabras para decir ni escuchar, tiramos a herir... a matar...

En esta relación, ya he muerto...

Me has vuelto a iluminar y después, sin vida, me he vuelto a quedar. Supongo tu luz también se ha de apagar, porque tu eres mi asesino, mi dador de vida y yo soy lo mismo para ti, par de víctimas que somos uno del otro. Dime mi luz, ¿Dónde queda el amor del inicio? ¿En qué momento pisamos la tierra y olvidamos volar?

Tus palabras son mi muerte, las mías la tuya, tu inmortalidad me da miedo, mi mortalidad más...

A veces siento que te hago más daño de lo que te amo...
Y te amo tanto...

Cansada de herirte:
Rebeca.

1 comentario:

  1. Un respiro, un pequñito espacio, unos dias tal vez. Pero siempre puedes sanar, reparar, recuperar, perdonar, amar. Todo esta lleno de amor.El egoismo es el cáncer del amor.Comunicación unas cuantas palabras sinceras, cargados de odiosa de verdad. Suerte, hay mucho amor en el aire. Sígue el aroma.

    ResponderEliminar